El nuevo modelo de la Supercopa de España regala a los rojiblancos una preciosa oportunidad para volver a ser campeones, algo que ocurre muy pocas veces y que, la verdad, es algo que ha llenado de ilusión a la plantilla de Simeone: empezar el año con un título.
El técnico sabe que puede dar un zasca a todos aquellos dirigentes que buscan ansiadamente ver otro Clásico lleno de morbo y aburrimiento. Simeone quiere ganar al Barcelona, plantarse en la final y pelear hasta el último segundo por conquistar la que sería la tercera Supercopa de España de la historia del Atlético de Madrid. Palabras mayores. Para ello se ha llevado a todos los disponibles y ha cogido más dinamita ofensiva procedente de la cantera con Camello, Valera y Riquelme.
Personalmente pienso como Simeone y hay que cambiar el ‘chip’. Es cierto que a ninguno nos gusta participar por este motivo, pero ya que vamos la ganamos. No me entra en la cabeza que el Atleti se haya desplazado hasta Arabia Saudí para darse un paseíto en un avión chárter y trotar en un estadio donde reina el machismo. Hay que desconectar de todo eso, centrarse en lo deportivo y pelear esa semifinal como si fuese de la mismísima Champions.
La buena dinámica del equipo en estos últimos partidos podría consolidarse en el torneo. Ganar a dos rivales de gran envergadura subiría la moral a los jugadores, empezarían a creérselo sobre el césped y, lo mejor de todo, se crearía una ola de optimismo entre la afición colchonera que sería muy difícil de parar en Europa. Ahora sí queremos ganar la Supercopa y creemos ciegamente en Simeone.
Los 50 rojiblancos desplazados hasta Yeda pueden ser los grandes afortunados de ver a Koke levantar el primer trofeo como capitán. A veces se necesita un poco de suerte para hacer historia, esa chispa de magia nos la ha regalado el señor Rubiales y Simeone se va a encargar de mover muy bien sus fichas para ganar la partida a sus cuatro rivales. Que empiece la fiesta.
Foto: atleticodemadrid.com
8 enero, 2020
Me temo que a nadie en Arabia Saudí le interesa ver una final Atleti-Valencia. Esa gente quiere su clásico particular y pagan por ello, por lo que creo que aunque seamos mil veces mejor en el campo que Barsa o Madrid o Valencia esto tiene un tufo a plato precocinado y preparado para tener su final Barsa-madrid.
Ojalá me equivoque, y si no, que al menos vea todo el «universo fútbol» que necesitan trampas arbitrales, Var manipulado y todo eso para poder ganarnos.. aunque en fin, ya se vió en las dos finales de Champions y nadie se acuerda ni a nadie le importa.
El relato es lo que queda.
Saludos
9 enero, 2020
Pues visto el húmero de público en el campo, no ha despertado ningún interés el trampas.