Koke Resurrección ha vuelto, y lo hizo a lo grande. El vallecano regresó a la selección española más de dos años después asumiendo el brazalete de capitán frente a Países Bajos. Su actuación en el Johan Cruyff ArenA confirmó el sensacional estado de forma que vive el canterano rojiblanco en este 2020. Koke completó los 90 minutos sobre el terreno de juego siendo el líder indiscutible de la medular española. Su rendimiento sobre el césped de Ámsterdam fue todo un aviso a navegantes: el capitán ha venido para quedarse.
762 días ha tardado Luis Enrique en corregir una clamorosa anomalía. Tanto él como Robert Moreno decidieron prescindir del vallecano de forma permanente. Ni el extraordinario año de Koke parecía salvarle de una decisión aparentemente inamovible. Con apenas 28 años, las puertas de España estaban cerradas de par en par para uno de los mejores centrocampistas de su generación. Hasta el miércoles.
La exhibición de Koke convenció con creces al seleccionador. Al término del encuentro, Luis Enrique no dudó en deshacerse en elogios hacia el centrocampista del Atlético de Madrid. “Koke es un jugador de una garantía total de que va a rendir a un altísimo nivel”, aseguró el gijonés. Su despliegue físico, su capacidad de distribución y su llegada permanente al área se convirtieron en un auténtico quebradero de cabeza para la ‘Oranje’. No en vano, Koke estuvo a punto de firmar uno de los goles de la noche tras una asistencia de Gerard Moreno. Su disparo se perdió por poco.
Suiza y Alemania serán las grandes pruebas de fuego para calibrar la importancia de Koke en los planes de la selección nacional. Los dos partidos de la Liga de las Naciones no solo definirán el futuro de España en el torneo, sino que también determinarán si la presencia del vallecano en el equipo español fue solo flor de un día. Mientras estas incógnitas se resuelven, el aficionado del Atlético de Madrid cruza los dedos para que Koke salga indemne de este parón internacional. A una semana de la visita del Barcelona, cualquier contratiempo físico puede resultar fatal. Y a diferencia de Luis Enrique, ninguna pieza resulta más valiosa para Simeone que la de su capitán.
Sin embargo, pase lo que pase de aquí en adelante, el regreso de Koke con España confirmó uno de los mayores actos de justicia futbolística de los últimos años. Durante este tiempo, el capitán tuvo que cargar sobre sus hombros críticas infundadas, valoraciones absurdas y el peso de una camiseta a la que los errores siempre le penalizan un poco más. Su vuelta ha acabado con todas esas tropelías. Ya era hora.
14 noviembre, 2020
A pesar de la idea comúnmente extendida de que jugar en la Selección es un premio al rendimiento deportivo de los jugadores, sigo pensando que la llamada de uno u otro jugador se trata de una pieza más dentro del engranaje del negocio del fútbol, por las siguientes razones.
La primera es que no existe una Selección ideal, cada persona tiene la suya propia y la conforma según criterios subjetivos, que pueden variar desde el estado de forma actual del jugador hasta la amistad personal.
La segunda es que la presión mediática influye. Llevar o no llevar a determinados jugadores de determinados clubes puede implicar el acoso y derribo de un seleccionador valiente, no hay más que recordar los episodios vergonzosos contra Luis Aragonés por dejar fuera a Raúl, o actualmente, por contra, con Luis Enrique y los minutos que está dando a S. Ramos solo para que este engorde sus estadísticas.
El ámbito de las Selecciones no está excluído de la superprofesionalización y es otro escaparate para promocionar jugadores, cada club con su cupo en función de su poder.
A ese respecto contribuye también el fútbol femenino, en que la última convocatoria de la Selección contó con cuatro jugadoras del recién ascendido real madrid y tan solo una del tricampeón Atleti.
¿Alguien se imagina a Luis Enrique convocando para la Selección a cuatro jugadores del Elche CF?
14 noviembre, 2020
Nadie lo imagina, aunque lo merecieren de sobra.
Efectivamente la central lechera no para un segundo en su misión inalienable.
15 noviembre, 2020
Che, lo de Asensio clama al cielo. Es el nuevo Guti. Jugador que desaparece mas que el Guadiana. Ahora resulta que hay que llevarlo a la selección para recuperarlo, como si la selección fuera una filial del Real Madrid.
En el segundo penalti de Ramos, hoy, es para llamarle la atención. Intentar hacerle un Panenka a un portero que no se va a mover hasta que tú le tires, como se vio en el primer penalti, es poner por delante tu ego, antes que buscar el resultado. En el gol de los suizos se va a una posición que era la de Merino y deja supuesto sin cubrir. Eric Garcia y Pau Lopez hacen mejor defensa, lo que se dice defender. A ver si le renuevan por dos años, aunque no creo que Florentino se deje engañar.
15 noviembre, 2020
La Selección siempre ha sido el escaparate del real madrid, o como bien dices, el filial.
Ha sido el banco de pruebas de la casa merengue bien para promocionar a algún jugador o para dar minutos a otro que no los tenía en su club, ejemplos hay para dar y tomar y casi todos los conocemos, (Iván Campo, Helguera, Amavisca,…).
Todo empieza desde que el presidente de la RFEF coloca al entrenador afín y continúa con el seleccionador que quiere evitarse confrontaciones con los medios convocando a los jugadores que a estos les gusta, no importa si son suplentes, como en el caso del idolatrado Nacho o L. Vázquez.
Me voy a quedar con algunas casualidades:
Tanto en fútbol como en baloncesto, cuando ha habido un seleccionador valiente (no afín al real madrid), ha durado muy poco, pese a conseguir grandes títulos. Véanse Luis Aragonés y Pepu Hernández, siendo sustituidos por entrenadores «de la casa».
Y para acabar, ¿alguien se ha preguntado por qué el uniforme de la Selección tiene que ser blanco y de la marca que patrocina al real madrid?.