Felipe, el martillo pilón que deseaba Simeone

La marcha de Godín nos ha dolido a todos en el alma por lo que ha significado en el club durante todas estas temporadas. Sin embargo, tenemos que continuar nuestro camino y forjar un Atlético que nos vuelva a dar tardes de gloria. El Cholo tiene la intención de construir una línea defensiva hecha a su imagen y semejanza, formada por tipos rebeldes que sean capaces de plantar cara al mismísimo diablo y, señores, Felipe Augusto es uno de ésos.

Pese a tener 30 años posee unas características físicas envidiables, manteniendo intacta esa frescura, potencia, chispa e ‘hiperactividad’ que se le pide a un central de alto nivel. Felipe Augusto es, posiblemente, uno de los mejores jugadores a la hora de disputar balones aéreos, tanto ofensivos como defensivos, debido a un potente salto que siempre acompaña con una fuerza descomunal. A esto hay que sumar que se desenvuelve como pez en el agua en en el área chica.

Defensivamente es un jugador muy curtido. Felipe va con mucha seguridad al cruce, dudando en pocas ocasiones, el cuerpo a cuerpo es su fuerte y tiene la magnífica virtud de adelantarse a los movimientos de los delanteros. Además, no le quema el balón en los pies y suele dar pases en largo a las espaldas de la defensa contraria con los que Morata, por ejemplo, podrá sacar a relucir su velocidad.

El fútbol de Simeone está hecho a medida para el brasileño. Puede pasarse 90 minutos defendiendo sin despeinarse, achicando balones o guerreando en nuestro área cuando el míster decida replegar filas ante rivales importantes. La experiencia le ha enseñado a medir perfectamente los tiempos de un encuentro y tiene esa estrella de líder con la que es capaz de convencer a todo un estadio de que algo se puede conseguir, de contagiar a toda una afición con una sola acción.

Si alguien tenía que sustituir a Godín debía ser, entre otros, Felipe. No se parecen futbolísticamente, pero ambos llevan  en su ADN el alma de líder. El central llega para conquistar grandes retos en su carrera como la Champions y Simeone lo va a utilizar a las mil maravillas. No tiene mucho nombre, no ha costado 100 millones pero es uno de esos hombres que tanto hemos echado de menos en partidos como el de Turín. Por eso, yo lo tengo claro: ¡bienvenido, Felipe!

Foto: cadenaser.es

Autor: Antonio Rodríguez

Periodista digital, de papel o de lo que sea, pero siempre reinventándome. Escribo sobre lo que me gusta y lo comparto con vosotros. De Almería. Música y mucho Atleti. Si se cree y se trabaja, se puede.

Comparte este contenido en
468 ad

2 Comentarios

  1. Estoy de acuerdo contigo hay que dejar trabajar al cholo y después si hay que criticarle se le critica con respeto.

    Escribe una respuesta
  2. Se están cerrando jugadores muy interesantes. Este es uno, también se está hablando de Hermoso, Marcos Alonso, y si Griezmann va al Barca que podría entrar en el pago de la cláusula, Semedo. Si cierran a Herrera que viene libre y suben a Montero, la defensa quedaría «coqueta» y el centro del campo reforzado. Semedo sería Filipe por la otra banda. Gran jugador.
    En cuanto dejar trabajar a Simeone, siempre se le ha dejado. Pero quiero decir una cosa. Creo que lo va a tener mas fácil, ya que este equipo rinde más sin tener dependencia de un jugador. Solo se puede depender de Oblak, el resto del equipo que trabaje en equipo y nos irá mucho mejor.
    Hay dinero y el club ha crecido en todos los aspectos. Por ello habrá muchos jugadores de nivel medio-alto, que no dudaran en venir.
    Si retenemos a Rodri y se ficha en esa linea, seremos un gran equipo. Muy solido.

    Escribe una respuesta

Envia un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies