Creer hasta vencer

Llegó el parón de selecciones como un corte publicitario en mitad de la película, justo cuando el protagonista está a punto de descubrir quién asesinó a su hija, y el España – Georgia fue lo más parecido a un anuncio de espuma para afeitar. Con ese atractivo, había que buscar algo que atrapase al espectador y amortiguase un poco el bajón de consumo que se produce cada vez que llegan estas franjas internacionales. Empezó con el enésimo intento de un conocido personaje de culpabilizar a Simeone de cualquier mal habido y por haber. Al menos, esta vez, no utilizó la vida de un jugador para mantener una cruzada contra el mejor entrenador de la historia del Atlético de Madrid que solo él entiende.

El parón nos permitió, nuevamente, ver las dos caras de la moneda. Luis Enrique, que tiene una plantilla mucho más amplía que el Atlético de Madrid, (puede llamar a cualquier jugador español) utilizó a Marcos Llorente en el lateral. Aún recuerdo a la canallesca, y a más de uno de los nuestros, disparar contra el Cholo por usar a Marcos como parche en un momento difícil de la temporada. Su objetividad, esa de la que tanto presumen, siempre se ha resumido en meter a Simeone en el centro de la diana, sea cual sea el debate, y esperar acontecimientos.

Otra imagen que pudimos ver en cualquier medio fue la del Haaland´s Tour. Mino Raiola y el padre del futbolista noruego dieron la vuelta a Europa y se reunieron con los más potentes equipos del continente para ofrecer al actual futbolista del Dortmund, como si de una pieza de ganado se tratase. No les quedó un rincón por el que pasar a escuchar ofertas y proposiciones, salvo el Metropolitano. El actual líder de la Liga, ese al que cada año se le exige pelear el título nacional, no está en la quiniela de posibles destinos del delantero de moda. A nadie se le ocurre, en ningún medio ni ningún corrillo peñista, exigir a la directiva del Atlético de Madrid pelear por fichajes como ese. Entonces, ¿Por qué a la hora de redactar objetivos, si se mete al conjunto rojiblanco en el mismo escalón de los clubes que pueden pelear ese tipo de fichajes?

Tras el partido en el Sánchez Pizjuán han vuelto a salir a la palestra personajes y monedas. Donde antes había una cara, una mejor plantilla de la historia, y un absoluto campeón de un torneo que muchos empezaron a bautizar como Liga Mickey Mouse; ahora hay una cruz, una plantilla que no vale para nada, con muchos jugadores que “llevan meses arrastrándose,” y el primer título de la historia que se pierde sin todavía haberlo ganado. Al resto, que vivimos alejados de caras o cruces y que sabemos que, en muchas ocasiones, la moneda también cae de canto: Seguir. Nueve finales por delante. Veintisiete puntos. Creer hasta vencer.

Foto: Getty Images

Autor: Marcos Martín

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5 Comentarios

  1. ¿Cómo voy a creer yo, si ni siquiera muchos jugadores creen en el Cholo?

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    • Deja de leer a Matallanas y rema. Cierra filas con tú gente y cree hasta el final. Si nosotros, los aficionados, no creemos, ¿Quién lo va a hacer?

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      • Si te sirve de consuelo, también escucho a Antomio Ruíz,, Talaveraa, Hugo Condes, Alejandro Mori y otros.

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  2. Evidentemente que hay que creer, pero no hasta llegar al límite de convertirte en un «tonto feliz» que traga con todo.

    La mano de Ocampos fue clarísima y ocurrió delante de la cara de Gil Manzano, el cual, al ver que el balón lo recuperaba el Sevilla debió pitar falta. Pero no lo hizo.
    De la misma forma se pudo inventar un penalti a favor del Atleti y aunque la Caverna hubiese bramado, los tres puntos habrían ido a la «butxaca» del Atleti. Pero no lo hizo.

    Una vez más ha tenido que ser la Unión de Peñas la que ha salido a señalar ese arbitraje, ante el silencio de la directiva, que solo habla cuando ven peligro para sus bolsillos.

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  3. Mientras haya posibilidad de ganar la Liga ,no nos podemos rendir. Eso nunca.
    Además no solo es por ser aficionado del Atletico, no. Es por la razón de que hasta el final siempre hay posibilidades.
    He tenido en estos últimos cinco meses la satisfacción de ver el «triunfo» de una persona que hace cinco años, se acercó a un grupo de regatistas de elite de Nacra 17 Foil, la formula 1 de la vela olímpica, y les dijo «Yo quiero ir a una Olimpiada». Le preguntaron que en qué clase navegaba. Les contestó que él solía ir en un barco de recreo, que tenía un amigo. Pero que a él lo que le gustaba eran «los barcos voladores». Los Nacra 17 Foil.
    El «pavo», Janne, tiene hoy día 45 años y en su vida se había puesto un arné.
    Lo segundo que dijo es que cuánto dinero podía costar. Se le rieron y le dejaron.
    Al día siguiente se enrolló con una paisana suya, Sinem Kurtbay, que había perdido la posibilidad de ir a Rio 2016, al no clasificarse en la clase 470. Le dijo que si a ella le gustaría llevar un Nacra, con él de «proel». Sinem casi lo manda a la mierda.
    Pero el tio era un «paliza». Y estaba muchos días preguntado a unos y a otros.
    Hasta que un día le dice a Sinem «He comprado un Nacra 17 Foil, y va a venir un técnico de la casa a montarlo ¿Quieres probarlo?
    Se han metido mas de quinientas hostias. Consiguieron traer a uno de los mejores entrenadores del mundo, junto con un equipo de colaboradores que no tiene ningún país, pagándoles el doble de lo que cobraban en Dinamarca. Consiguieron entrar a formar parte de los entrenos del equipo olímpico español. Su primera regata fue el Sofia de Palma en 2018, quedando últimos y con varias mangas entrando fuera de la hora limite de llegada.
    Hace dos semanas en Lanzarote se celebró la ultima Regata Internacional en la cual solo había una plaza, la ultima, para ir a la Olimpiada de este año.
    En la ultima popa de la ultima manga con casi 25 nudos de viento, Janne le dijo a Sinem «Ahora no puedes fallar, estos últimos 900 metros, valen 5 millones de euros». Entraron delante de Grecia y consiguieron su plaza. Estarán en Japon.
    Janne Järvinen es el dueño de varias compañías dedicadas al sector de renovables en Europa y en Centro America, con un gran patrimonio personal. Va cumplir su sueño de ir a una Olimpiada representando a su país, Finlandia, pero podría ser el protagonista de una película real.
    Por eso, conociendo todo lo que ha tenido que pelear esta persona para lograr este triunfo, nosotros los aficionados del Atletico no podemos dejar de hacer lo mismo. Hasta la ultima popa¡¡¡

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