Si algo caracterizaron las primeras temporadas del Cholo en el Atleti es que el equipo competía igual de bien en el Calderón que fuera de casa. Éramos molestos en casa como a domicilio, el equipo tenía una idea de juego fija a la que nada hacía alterar el guion.
En los dos últimos años algo ha cambiado y el equipo baja muchos enteros a domicilio. El año pasado en la Liga costaba mucho ganar fuera y en la Champions los partidos en Brujas, que nos privó del primer puesto en la fase de grupos y en Dortmund fueron un auténtico despropósito.
Este año la cosa va por el mismo camino, en Liga solo hemos ganado en Leganés, Mallorca y en Sevilla al Betis; muy pobre bagaje para asegurar la plaza de Liga de Campeones, de hecho en lo que va de 2020 el equipo no ha conseguido ganar a domicilio pese a haber visitado estadios de equipos de la parte baja como Eibar, Cornellá o incluso León en Copa.
Sevilla, Getafe y Real Sociedad están pujando muy fuerte por ocupar este año plazas de Champions y para el Atleti sería una ruina económica no jugar la máxima competición continental, así que toca ponerse el mono de trabajo lejos del Metropolitano.