Red&White mirror

Se hizo oficial lo que llevaba tiempo siendo el run run de todos los foros y redes sociales: El fútbol se jugará a puerta cerrada hasta principios de 2021. La Liga se reanudará sin público en las gradas. Solo el sonido de los golpeos al balón y las voces de técnicos y jugadores dando instrucciones se podrán escuchar en unos recintos enormes que carecerán de alma. Porque el futbol va más allá de lo que pasa en el terreno de juego, es una cultura que transciende de los 90 minutos reglamentarios y un estilo de vida para quienes se reúnen cada quince días en los feudos de sus equipos.

La Liga ha intentado poner remedio a esto. A pesar de sus trabas al aficionado durante estos últimos años se han dado cuenta de que sin colorido y cánticos el deporte rey pierde la esencia que lo caracteriza y se convierte en una aburrida partida de ajedrez que solo los más puristas disfrutarían íntegramente. La solución que plantean es utilizar la tecnología para que el hincha, para ellos cliente, esté de alguna manera presente en el estadio. Una nueva manera de seguir haciendo caja con las ilusiones y pasiones de quien vive esto con la irracionalidad y sentimiento propios del amor incondicional. Hemos sido muchos los que nada más escuchar esta opción hemos visualizado en nuestra mente un magnifico capítulo de la serie Black Mirror y a su público holográfico. Un efecto completamente artificial y frío que pretende instaurarse ahora para combatir unas perdidas millonarias por ingresos de abonos y entradas. Porque no nos equivoquemos, el lobo siempre ha tenido oscuras intenciones y nunca ha ido con buenos sentimientos hacia las ovejas.

Los mismos dirigentes que han maltratado al aficionado con precios abusivos quitándole la condición de pilar básico para el sustento del club y cambiando esa naturaleza por la de cliente no hacen esto por el bien del fútbol. Los mismos que ponen muchas trabas y pocas facilidades al seguidor que se desplaza con el equipo, y que en muchas ocasiones es tratado como delincuente, no hacen esto en favor de las gradas. Nuestro presidente llegó a afirmar en alguna ocasión que “el sentimiento en el fútbol se debe erradicar.” Buscan matar la afición y fomentar el consumo indiscriminado y el negocio. Clientes que consuman, influencers que fomenten compras masivas y altos cargos con los que establecer negocios ajenos al fútbol. Ese es el público que quieren. Si lo que ahora proponen tiene altos índices de éxito, me temo que estaremos ante un nuevo fútbol tal y como lo conocemos.

Autor: Marcos Martín

Comparte este contenido en
468 ad

Envia un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies