Es propio de la condición humana querer mejorar, la ambición forma parte de la esencia del hombre, y de la mujer, no se me vaya a enfadar Irene Montero. Todos aspiramos a poder ganar más dinero y en el caso de los futbolistas, además estar en sitios donde se ganen títulos, aunque eso salvo donde tienes a Messi de compañero o los árbitros siempre a favor en los momentos clave, no te lo garantiza nadie.
Griezmann empezó la temporada pelín despistado, en verano, y, aunque mostró compromiso con el club doblándose la cláusula de rescisión en un periodo en el que el equipo no podía fichar, en las redes sociales parecía disperso y eso tenso la situación entre la afición y el francés. Ahora, tras el apoyo de Simeone y ciertos gestos suyos con Gabi y la afición en el partido ante el Athletic, tras el enfrentamiento el día del Valencia, parece que las aguas vuelven a su cauce y le veo más centrado y con posibilidades de seguir el año que viene.
Griezmann no es canterano, como tampoco lo eran Filipe Luis, Diego Costa o Arda Turan, jugadores que reinaron con la rojiblanca pero al irse fuera no acabó de irles del todo bien y nadie como ellos para explicarle a Grizzi que como en casa, aunque no sea la tuya de la cuna, en ningún sitio y aunque por ahí pueda ganar más dinero e incluso algún título más que aquí, igual eso no le hace tan feliz como volver a liderar a los guerreros del Cholo.
20 febrero, 2018
No seamos ilusos, se irá a fin de temporada, y….