Cada vez que el Atleti juega fuera de casa a Simeone le da un severo dolor de cabeza que acaba, en la mayoría de las ocasiones, con el equipo tirado en la camilla y con fiebre. La Champions League regresa para reencontrarse con el paciente rojiblanco, aquel equipo que no consigue una victoria fuera de casa desde una fría noche en Moscú.
El Bayer Leverkusen es el rival idóneo para pisar el acelerador a fondo y acabar con la mala racha lejos del Metropolitano. Los alemanes no son muy peligrosos en ataque y defensivamente suelen tener bastantes desajustes cuando se les ataca entre líneas. Además, psicológicamente son muy vulnerables cuando reciben el primer tanto y ahí el Atleti es cuando debe hacer más daño y cerrar el partido.
Todo apunta a que el técnico dará descanso a algunos jugadores. Arias, Vitolo o Llorente pueden partir desde el inicio. Luego, todo apunta a que Morata y Costa serán los delanteros y Correa, que está más enchufado que nunca, jugará detrás de la dupla. Saúl volverá al BayArena, un estadio que le ha visto llorar y reír, allí se lesionó de gravedad de un riñón y en ese mismo césped anotó un golazo que encarriló en aquel momento la eliminatoria.
Los octavos de final, a punto. Los colchoneros pueden conseguir en esta jornada el pase para la siguiente fase. Para ello, el Atleti debe vencer en Alemania y la Juve en Moscú; de ser así, ambos sacarían 7 puntos de ventaja al tercer clasificado a falta de dos jornadas. Por otro lado, para poner la guinda y ser primeros, los de Simeone deberían golear al Leverkusen para superar el ‘golaverage’ con el conjunto italiano.
El partido llega en el momento exacto y ante un rival perfecto. El Atleti tiene la capacidad suficiente para sacar adelante el encuentro, dejar avanzada la clasificación para la siguiente ronda y, ya de paso, convencer al personal de que lo que se vio en la segunda parte del Pizjuán pueden continuarlo durante 90 minutos. Los rojiblancos necesitan tomar la pastilla Bayer y acabar con todos los dolores cabeza.
Foto: atleticodemadrid.com