El Atlético de Madrid regresa a casa. Los colchoneros volverán a disputar un partido en el Metropolitano más de cuatro meses después. Sin embargo, a diferencia de lo que sucedió el 7 de marzo frente al Sevilla, el feudo rojiblanco contará con las gradas vacías para la visita del Real Valladolid. Será la primera vez en la historia del joven estadio que se albergará un encuentro a puerta cerrada. La última vez que el Atleti jugó como local bajo estas circunstancias se produjo el 26 de noviembre de 2008. En aquella ocasión, el cuadro de Javier Aguirre derrotó al PSV por 2-1 en la quinta jornada de la fase de grupos de la Champions. Los incidentes provocados por los ultras del Olympique de Marsella hicieron que el presidente de la UEFA, Michel Platini, decidiera cerrar el Vicente Calderón durante un partido.
Ahora, la coyuntura es totalmente distinta. La pandemia del coronavirus dejará los campos vacíos de forma indefinida. Clubes como el Espanyol ya han presentado sus protocolos de seguridad para reabrir parcialmente sus gradas. Pero mientras el Gobierno estudia aprobar esta medida, los equipos tendrán que mantener la extraña costumbre de jugar sin público. En este sentido, el Atlético de Madrid es uno de los conjuntos más perjudicados. A nadie se le escapa que la entidad colchonera cuenta con una de las mejores aficiones de España. De hecho, la hinchada rojiblanca tiene el segundo mejor ratio de asistencia de Primera División. Su 83,7% de media solo ha sido superado por el 84,5% del Nuevo Los Cármenes de Granada, un estadio que posee una capacidad casi cuatro veces inferior al Metropolitano.
La ausencia de la afición atlética será la principal desventaja que tendrá que afrontar el cuadro de Diego Pablo Simeone en su vuelta al estadio de San Blas. El ‘Cholo’ es consciente de esa dificultad añadida, pero no busca excusas: “Tenemos que acostumbrarnos y adaptarnos a lo que nos marcan las circunstancias”, añadió en rueda de prensa. La situación del conjunto madrileño en Liga no da lugar a las distracciones. Una victoria esta noche permitiría al Atleti afianzarse en los puestos Champions y recuperar la tercera plaza, lugar que no ocupa desde la jornada 20.
Para afrontar este desafío, se espera que el técnico argentino realice bastantes rotaciones con respecto al once que apabulló a Osasuna este miércoles. Los últimos ensayos apuntan al regreso de Trippier y Thomas al equipo titular. Las grandes novedades podrían estar en la banda izquierda y la punta de ataque. En el lateral zurdo, Mario Hermoso cuenta con opciones de dar descanso a Lodi y ser de la partida por primera vez desde que se reanudó la competición. Thomas Lemar y Álvaro Morata serían las otras dos sorpresas de Simeone en su planteamiento inicial. Quien también tiene posibilidades de salir desde el comienzo es Marcos Llorente. El mediocentro es la gran sensación del equipo después de dar otra exhibición como segundo punta en El Sadar. Sin embargo, la titularidad de João Félix parece incuestionable. Más aún, después de su ‘doblete’ en Pamplona.
Con todas estas armas, Simeone intentará derrotar al Valladolid. No es el Pucela un equipo que se le dé especialmente mal al Atleti. Los colchoneros le han ganado al conjunto blanquivioleta en ocho de sus últimos nueve duelos. La última derrota data del 1 de febrero de 2009, cuando los goles de Prieto y Víctor provocaron la destitución de Javier Aguirre como técnico rojiblanco. Desde entonces, la trayectoria con el cuadro vallisoletano ha sido prácticamente inmaculada. Esta noche, los pupilos del ‘Cholo’ esperan seguir con la racha en su vuelta a casa. Hogar, dulce hogar.
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