Tanto va el cántaro a la fuente

Esta vez apenas dio tiempo a comprobar si el equipo había salido con la lección de las primeras partes aprendida, si estaba dispuesto a no sestear ni desperdiciar la mitad del tiempo. No dio tiempo a saber si el once que dispuso Simeone, la defensa de cinco habitual, Llorente, Kondogbia y De Paul por delante, con Griezmann y Suárez en el frente de ataque, estaba activado para la reivindicación porque, en Mendizorroza, el Alavés, en la primera pelota parada del partido, minuto cuatro, ya se puso por delante con un cabezazo de Laguardia ante la pasividad de Savic.

El Alavés venía falto de confianza y de resultados y con ese gol recuperó de súbito ambas cosas. Su plan defensivo se vio fortalecido por las circunstancias y la maraña que colocó Calleja por delante de Pacheco, con una doble línea de cinco defensas y cuatro mediocampistas muy juntitos, nubló todas las ideas del Atleti. Los de Simeone no encontraban ni la precisión ni la velocidad que requiere el juego para desmontar defensas tan pobladas y ni por dentro, ni por fuera consiguió asaltar la portería visitante. Kondogbia destacaba sobre la planicie del resto, lo intentaba el mediocentro, recuperaba, distribuía a un lado y al otro, pero Carrasco y Llorente no se ven frescos por fuera, De Paul y Griezmann estuvieron casi inéditos por dentro. Así se pasó toda la primera parte, con un Alavés cómodo en su pertrecho defensivo, con un Atleti que apenas asomó en un par de ocasiones tímidas al balcón de Pacheco.

En la segunda mitad, Simeone dejó correr diez minutos y en vista de que todo parecía ser igual, decidió cambiarlo todo. Puso la defensa de cuatro, sacó a Hermoso, Carrasco, Trippier y Kondogbia y metió a Correa, Lodi, Cunha y Herrera. Sobre todo, a las espaldas de Correa, con sus giros inesperados, el Atleti se encendió, la tuvo en un disparo que despejó bien Pacheco y en otra internada al área en la que eligió mal la opción de centro cuando el chut era franco. Todo pasaba por el vértigo que el argentino había metido al partido, el juego se volcaba involuntariamente en él, pero duró poco su efecto. Enseguida el Alavés se rehízo y volvió a su impoluto papel de destrucción. El Atleti no tenía más alternativa que las rupturas de Angelito Correa. Griezmann estaba desaparecido, Cunha casi inédito, no digamos Suárez, que no pudo reeditar el milagro del miércoles. El tiempo volaba y el Atleti no encontraba un resquicio en la inmaculada defensa vitoriana. Como último recurso, entró Vrsaljko, tal vez buscando centros laterales que encontrasen el remate de las dos referencias ofensivas. Pero no hubo. Solo pelotazos de De Paul y Lodi que eran bombones helados para los aguerridos defensas blanquiazules. El Alavés a la contra perdonó la sentencia hasta en dos ocasiones, pero el Atleti no tenía ni el aliento que se necesita para ultimar alguna de esas máximas del fútbol. Y así, de tanto ir el cántaro a la fuente, se acabó rompiendo. Llegó la primera derrota del año, esperada, pues el equipo, desde aquella primera parte frente al Villarreal, había entrado en un embudo de mal juego del que no ha sabido salir. Sostuvo los resultados conforme a la fe y al milagro, pero en Vitoria no hubo ni lo uno ni lo otro y puso la rodilla en tierra por primera vez, demasiado pronto, en un campeonato que no ha arrancado con el mejor impulso.

FOTO: IMAGO / TEXTO: JOSÉ LUIS PINEDA

Autor: José Luis Pineda

Colchonero. Finitista. Torrista. Nanaísta. Lector. Escribidor a ratos. Vivo en rojiblanco.

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5 Comentarios

  1. Saben lo que pienso del Cholo, y no voy a repetirme. Estoy avergonzado de la imagen que ha dado mi equipo, sobre todo como siempre, en el primer tiempo. No entiendo como se castiga al mejor delantero en la actualidad del equipo, o sea Correa, para meter con calzador al enchufado del Cholo. Un jugador que se vurló de sus comkpañeros, chuleó a la afición, y menos preció al equipo, borrándose en momentos importantes. El premio a conseguir, no ppuede ser mejor, sentar al mejor delantero del equipo, y poner al niño mimado del entrenador. Hemos perdido contra el colista, pero no pasa nada. Espero que los atléticos no busquen en los árbitros esta derrota, o el mal juego del equipo en todos menos en el que más cobra para que esto funcione. Pero bueno el club ha querido que siga, y tenemos tres años para ver el éxito o fracaso del entrenador. Alguien este año en el foro, decía que había llegado el momento de exijirle al Cholo juego y resultados.¡A ver si es verdad!
    Espero que el martes la imagen del equipo, sea distinta, aunque, soy sincero, no tengo ninguna confianza; hace años que la perdí.

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  2. Muy de acuerdo con lo escrito. Por añadir algo:

    – Faltan los centrales. Del Savic imperial del año pasado no hay rastro, y Felipe es un cero a la izquierda, uno de los máximos generadores de oportunidades para los contrarios desde hace ya demasiado tiempo.
    – Faltan los milagros de Oblak Todo lo que nos va a puerta acaba en gol.
    – Falta Koke. Me da la sensación que sólo tenemos buen fútbol con él dentro del campo.
    – Falta que el Cholo sea justo y ponga a Correa titular y en su sitio, aunque eso signifique dejar al francesito fuera.
    – Falta que Suárez coja la forma. El Gol lo tiene, y lo tendrá con 90 años, pero tiene que aportar mas y está jugando muy limitado.

    Simeone tiene trabajo por delante, y hay que confiar, pero a veces se enroca en decisiones difícilmente comprensibles y nos desesperamos. Desde este nivel sólo se puede mejorar.

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  3. También faltan aficionados con un poco de paciencia que reconozcan que son aficionados y no entrenadores, que desconocen la mayoría de los elementos esenciales y las valoraciones que se necesitan para entrenar, hacer una alineación y plantear un partido. Y sobran
    O P O R T U N I S T A S con ganas de ajustar cuentas y odiadores profesionales.

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  4. Es muy fácil hablar a posteriori. Seguro que antes de comenzar el partido y conociendo la alineación, nadie pensaba en perder frente al Alavés.

    Esta versión de fútbol ofensivo del Atleti, que tanto querían los detractores de Simeone, parece que no carbura y no termina de arrancar bien, lo que no significa que no vaya a funcionar en el futuro, el propio Simeone confía en ello. Habrá que creerle.

    A mi me da la impresión que si bien Diego Simeone tiene muy controlado el aspecto táctico defensivo, no lo tiene tanto en el aspecto ofensivo.
    Desde el comienzo de la temporada se está viendo que el cambio de sistema afecta negativamente a la eficacia de la defensa. Atrás han quedado los tiempos en que los rivales se afanaban en poder llegar siquiera a la portería de Oblak.

    Parece ser que el testigo de aquel juego lo ha recogido el Villarreal.

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  5. Hay dos opciones, o esperamos atrás bien pertrechados y robamos y salimos rápido o jugamos con Luis Suárez en el área contraria y le acercamos el equipo para que le metan balones.
    Pero sorber y soplar no se puede, la primera opción «la hace cualquiera» y es «de equipo pequeño» y en la segunda opción si te roban el balón la defensa tiene que correr de espaldas por lo que hay más riesgo.

    Es un difícil equilibrio, y lo mismo pasa con Griezmann, si queremos que vuelva a ser el que era necesita adaptarse y tener minutos de competición, pero mientras tanto es un inoperante y tenemos sentado a Correa… en fin, no le veo una solución sencilla a esto.

    Saludos

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