La sencillez hecha una obra de arte. Dos suspiros y Thomas cambia el juego a la otra banda, hace un pase vertical entre los defensas o roba un balón comprometido sin apenas despeinarse. El ghanés se lo está creyendo, es un tipo estupendo y se ha quitado el sambenito que muchos haters le habían colgado.
El Cholo Simeone pedía a los más veteranos que dieran un paso al frente y Thomas ha dado cinco. El africano corretea por el césped con una seguridad en su juego que relaja a la afición, cuando cae el esférico en sus botas sabemos que va a ocurrir algo interesante. Además, es el segundo máximo goleador del equipo con dos tantos que tienen su sello, con potencia y llegando desde atrás, tira las faltas y es un buen lanzador de córners.
Thomas Partey arrancó la temporada un poco descafeinado, con un desafortunado partido en Leganés que le costó ser sustituido y salir del once titular. Luego, desde el banquillo, fue el protagonista ante el Eibar provocando el éxtasis en el Metropolitano con su gol. A partir de ahí, el joven no ha parado de crecer. Un gran encuentro en Mallorca, una exhibición ante el Madrid y una actuación de crack en Moscú son las últimas joyas del ‘5’.
La seguridad que transmite el ghanés está provocando que sus compañeros arriesguen más y, en definitiva, mejoren. Saúl y Koke van tomando color y Joao, por fin, empieza a soltarse la melena, arriesga en jugadas e innova en ataque. Thomas, con la escoba, se encargó de recuperar la pelota y devolverla al colchonero que estuviese mejor colocado.
No sabemos si tiene alma de líder en el vestuario, pero en el campo está siendo el mejor. Partey es el diamante por el que pasa el juego ofensivo del Atleti, pero se hace carreras de 60 metros para tapar la posición perdida del central. Thomas está en todos los lados, acierta en sus decisiones y no para de crecer. Un tipo enchufado que llegará a donde quiera.
Foto: atleticodemadrid.com