La milonga de jugar bien

Durante una década que para algunos fue interminable y para otros, a la vista de los hechos, resultó demasiado corta, el Atlético de Madrid ni jugaba bien, ni mal, ni todo lo contrario. Era un equipo tan insípido, tan despojado de su esencia histórica, tan falto de argumentos para cualquier cosa que no fuese claudicar, que los adalides del pensamiento único se sentían cómodos pudiéndose dedicar a cosa, disfrutando de aquella bien ganada falta de consideración.

Pero hete aquí que llegó un señor y obró un milagro y, casi de repente, resucitó el ADN de un equipo que parecía abocado a la extinción. Simeone convirtió al Atlético de Madrid en lo que siempre había sido, un club en permanente lucha contra el poder establecido. Lo hizo de una manera aparentemente sencilla, apelando a valores como el esfuerzo y la Historia. Entonces, el Atlético de Madrid dejó de ser una ridícula comparsa para convertirse en un equipo verdaderamente molesto, inaccesible, demoledor, sin fisuras. Comenzó a ganar y a ganar, primero partidos, luego crédito, y finalmente títulos, ante el asombro de todos que veían como aquel elemento extraño había venido a sacudir la ignominiosa calma que iba rotando el mando entre los dos únicos poderosos.

Entonces llegó esa historia que ustedes conocen bien. La que tuvo una primera versión en “el Atleti es un equipo violento” y que, tras un proceso de incoherencias inasumibles (y esto es mucho decir), ha derivado en “el Atleti no juega a nada” o “el Atleti no juega bien”. La mayoría, de una manera interesada, compra esta teoría que desgraciadamente va calando – a la fuerza ahorcan – en los mentideros futbolísticos. ¿Cómo que el Atleti no juega bien? ¿Cuál es el organismo o ejemplo que dictamina qué es lo que significa jugar bien?

La grandeza del fútbol reside en la cantidad de variantes que ofrece para lograr el objetivo: ganar. El equipo que gana mucho tiene que obligatoriamente jugar bien para hacerlo. Esto es un axioma indiscutible por más que los voceros de un régimen que se derrumbó con la llegada del Cholo se empeñen en discutir lo contrario. De hecho me atrevería a decir que el Atleti es probablemente el que mejor juega de todos los equipos que yo he visto. El equipo que, con menos, te da más. Eso es jugar bien. Saber conocer tus virtudes con tanta profundidad como tus defectos. Saber con precisión cuál es el camino que no tienes que tomar. Eso es jugar bien. Saber encontrar el camino hacia la victoria, pelear de tú a tú con otros que te doblan el presupuesto: eso es jugar bien. No se dejen engañar por milongas. El Atleti juega bien, probablemente mejor que nadie.

 

Foto: Ángel Gutiérrez – clubatléticodemadrid.com

 

Autor: José Luis Pineda

Colchonero. Finitista. Torrista. Nanaísta. Lector. Escribidor a ratos. Vivo en rojiblanco.

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