El Atleti necesitaba ganar, sobre todo ganar, siempre es ganar lo más importante, pero a veces también se necesita convencer. No ya a los de enfrente, ni a los escépticos, ni siquiera a los tuyos, convencerte a ti mismo, al equipo como ente singular, a cada uno de los jugadores de manera individual, al cuerpo técnico también, claro, de que el equipo es más esto y no aquello. Que el equipo puede y debe ser esto. El Atleti necesitaba demostrarse a sí mismo que puede ganar sin agonía, con solvencia, con autoridad, sin ningún tipo de duda ni ambage. Y así fue en Cádiz, hizo el partido que todos tenemos en la mente al comienzo de cada uno. Ganó, sin sobresaltos, con la fuerza y la convicción de un campeón.
Simeone repitió el mismo once del desastre ante el Milán y desde el minuto uno quedó claro el guion de partido. El Cádiz de Cervera trataba de recuperar su perdida solidez defensiva, entregaba el balón, la iniciativa y el tiempo y el Atleti trataba de saber qué hacer con todo eso. Jugaba en campo contrario, lo intentaba mucho por dentro, con Lemar y Griezmann intentando asociarse permanentemente, con alguna incursión de Llorente, alguna de Carrasco, pero la velocidad que imprimían al juego Koke y De Paul no alcanzaba para llegar hasta la proximidad del gol. El Atleti dominaba el partido, pero no pisaba el área, el Cádiz miraba con alegría cada minuto descontado. Así pasó todo el primer tiempo.
En la segunda mitad, antes de que Simeone empezase a mover los cambios para activar el partido llegó el gol que lo cambiaría todo. Carrasco metió una pelota al área a pierna cambiada desde el costado izquierdo y Lemar cabeceó a la red. Simeone lo celebró sentándose por primera vez, suspirando, con la cara demudada, pálido, como si acabasen de quitarle de encima el gran lastre de su vida. Con el uno a cero el Cádiz vio truncado su plan y el Atleti liberada su angustia. Esta vez no hubo paso atrás, siguió atacando hasta que consiguió el dos a cero con una internada de Llorente que asistió para que Griezmann hiciese el gol en remate con la derecha dentro del área.
No parecía el Cádiz con aliento para levantar aquello, pero por las dudas, entraron Correa y Cunha y aportaron vitalidad, hambre, voracidad ofensiva. El Atleti siguió atacando, ya liberado de la presión del resultado y pronto Correa, en una jugada para enmarcar, por el ritmo vertiginoso, por las combinaciones precisas, hizo el tercero. Ahí, los de Simeone se relajaron, pero los espacios que el Cádiz, fruto del cansancio y la frustración iba dejando, invitaban ir a por más, erró ocasiones para cerrar una goleada de escándalo y al final, en un rebote, Oblak por un segundo pareció Toni Jiménez, y se comió uno de aquellos goles ridículos que ya parecían pertenecer a otra época. No hubo zozobra ni duda porque en la siguiente jugada Griezmann asistió a Cunha que puso el sello a un gran partido rematando a gol desde dentro del área el cuarto del Atleti, que cerró el marcador y también el partido que tanto necesitaban las gentes colchoneras.
Ganó el Atleti en un fin de semana triste por el fallecimiento de Almudena Grandes, una de las más grandes escritoras españolas, corazón y alma rojiblanca, alguien que supo explicar como nadie el sentimiento rojiblanco. La lloran las gentes del Atleti y el equipo le regaló estos goles para su primer partido en ese tercer anfiteatro desde donde ahora seguirá viendo a su equipo del alma.
FOTO: ATLETICODEMADRID.COM
29 noviembre, 2021
Pedazo futbolista Lemar, que no baje el nivel, es una bendición. Carrasco, aunque a veces quiere regatearse a sí mismo, es muy desequilibrante y se está saliendo. Fundamental.
Si se integra definitivamente Joao, este equipo es muy «lustroso». No sé que dirán por ahí, pero somos (con todas las dificultades que llevamos esta temporada) el segundo equipo goleador en Liga. Y un partido menos. Todo en la vida es ver las cosas desde la ilusión.
Esto es fútbol, un día no entran y otro metes cuatro en media parte. Este juego es así. Por eso nunca he entendido lo del tema del «pupas» con el Atleti en exclusiva, como si los otros no. Es que es fútbol!
Aupa atleti. Ganar, ganar y volver a ganar.
29 noviembre, 2021
Yo creo que el resultado es engañoso, no porque el Atleti no fuese superior al Cádiz, que lo fue, sino porque el Atleti fue durante muchos minutos ese equipo ineficaz en ataque que hemos visto en algunos partidos esta temporada.
La defensa del Cádiz mantuvo a raya al Atleti, que se perdía en toques y más toques con el suspense de que en alguno de ellos se iba a errar y se iba a permitir la contra del equipo gaditano, ese juego, con todos los respetos para el Cádiz, frente a un equipo al que le gusta salir a la contra como el real madrid, nos puede costar un doloroso disgusto.
Fue en el tramo final de partido cuando el Cádiz, sin fuelle físico, abrió las líneas y se llevó tres goles más.
En homenaje a Almudena, nada mejor que reproducir sus propias palabras:
«Nosotros, los colchoneros, no somos del Atleti.
Nosotros, los indios, somos el Atleti. Una simple preposición lo cambia todo».
29 noviembre, 2021
Si cambias esa reflexión por la de que si Suárez enchufa la que tuvo en el primer tiempo el Cai se lleva un saco.