La historia de una redención
Con la resaca de la final todavía en el cuerpo, se hace complicado poner todo lo vivido en perspectiva y escribir unas líneas. Es lo que tiene esta droga llamada Atlético de Madrid. Te mata, te da la vida. Te eleva al cielo y te hunde en el infierno. Te encumbra hasta el éxtasis mientras te devora por dentro. Y sin embargo, te hace sentir más vivo que nunca. Esa es, a fin de cuentas, la felicidad de aquellos que renunciamos...