El Metropolitano se vestirá de gala esta noche para homenajear a uno de sus iconos más recientes. JuanfranTorres regresa a Madrid para disfrutar del tributo que él mismo decidió no recibir en su último partido como local la pasada temporada. Todos sabían que su final estaba cerca, pero el todavía lateral colchonero prefirió alejarse de los focos para no opacar la despedida de Diego Godín. Aquel día era exclusivamente para el ‘Faraón’. Simplemente, porque así lo había decidido Juanfran. Un señor de los pies a la cabeza.
La brillante carrera de Juanfran como rojiblanco es la historia de una conversión permanente. El de Crevillenteaterrizó en el Calderón una fría noche de enero procedente del Club Atlético Osasuna, rival de los colchoneros en el día de hoy. Sobre él pesaba la sombra de un pasado como canterano madridista. En Concha Espina, Juanfran apenas gozó de oportunidades, pero sus notables pasos por Espanyol y Osasuna le sirvieron para regresar a Madrid. Eso sí, con el eterno rival. La responsabilidad de reemplazar a Simão (que había sido traspasado al Besiktasen ese mismo mercado) pasaba por sus botas.
Pero aquel extremo de raíces vikingas acabó convirtiéndose en leyenda atlética como lateral. Sus inicios de rojiblanco no fueron precisamente fáciles. Y eso que únicamente tardó dos días en debutar con la zamarra colchonera. Lo haría, precisamente, en el Santiago Bernabéu. Pero aquello fue un espejismo. Juanfran pasó su primer año en la ribera del Manzanares intercambiando el banquillo y la grada. Andaba el alicantino buscando su sitio por el césped cuando Gregorio Manzano decidió probar con él como lateral derecho en un encuentro liguero frente al Granada.
El resultado de aquel experimento fue desastroso. Sin embargo, sentó las bases de la gloriosa carrera que desempeñaría Juanfran por el flanco derecho del Atleti. Así, una vuelta después, Juanfran culminaba contra el propio Granada la mejor jugada de su carrera. Robó el balón en su área, se lanzó dos autopases para eludir a cualquier rival y sirvió un centro al área que puso en bandeja el 2-0 de Radamel Falcao. Aquella fue la primera de las muchas veces que el Calderón coreó al unísono su nombre. En la otra banda, un hombre de traje negro y semblante jovial aplaudía risueño la gesta de su lateral. Su nombre, Diego Pablo Simeone.
El ‘Cholo’ cambió la vida deportiva de Juanfran. Su llegada al banquillo del Atlético de Madrid consolidó al alicantino como el amo y señor del lateral derecho. Junto a él, Juanfran se convirtió en uno de los pilares del mejor Atleti de la historia reciente. Su nombre es pieza indispensable dentro de la mejor defensa que ha dado el fútbol europeo en esta década. Una defensa que jamás se entendería sin Juanfran. De la mano del argentino llegaron siete títulos como rojiblanco y una Eurocopa con España. Esta noche, Juanfran se reencontrará con el tipo que lo hizo leyenda.
La de Juanfran será la quinta despedida que vive la hinchada atlética en apenas dos años. Tiago abrió la veda con su retirada en el último partido del Vicente Calderón. Al portugués le siguieron Fernando Torres, GabiFernández y Diego Godín. El alicantino será el último de una gloriosa generación en despedirse de su gente. Con él, se pone punto final al mejor capítulo de la centenaria historia atlética. Aquel en el que, como diría Loquillo, fuimos los mejores. Hasta siempre, capitán. Gracias infinitas.