La introducción del marketing a gran escala en el fútbol y la explotación de los derechos televisivos han hecho elevar los ingresos de los clubes a unos niveles, que en los lugares donde no ha habido equilibro en el reparto o mala gestión del mismo las diferencias entre equipos hayan provocado que algunas ligas del viejo continente sean verdaderamente aburridas.
Entre los casos más paradigmáticos está Alemania, donde el reparto televisivo está bastante equilibrado para el montante total del valor de la Bundesliga es tan bajo, que con una gran gestión de los ingresos atípicos el Bayern supera ampliamente en ingresos a sus competidores llevándose la Liga de calle durante demasiados años seguidos, lo cual hace perder que el aficionado, no alemán, pierda todo el interés por ese torneo, ya que no sólo los bávaros salen campeones con muchas jornadas de antelación, sino que cada año le fichan a su mejor jugador el segundo en discordia, el Dormund.
Algo similar ha ocurrido en los últimos años en España, donde la reciente reirrupción del Atleti ha maquillado un poco el panorama que el nefasto reparto televisivo de la dupla Tebas-Roures había generado con una diferencia abismal entre Madrid y Barça con respecto a los demás, provocando que sea un milagro que sea campeón alguien que no sea uno de los dos. Formula que a todas luces es ineficaz, si vemos, que en Inglaterra, donde el reparto es equilibrado y hay alternancia en los candidatos el torneo se vende por 3000 millones de euros, frente a los 1200 de la monótona Liga española, donde cualquier pinchazo de los dos del régimen es un drama, incluso en campos donde en los 80 era un milagro puntuar.
Sin existir ninguno de los condicionantes de Alemania o España, el Calcio ha entrado en barrena desde hace un par de lustros. Estadios vacios, muy malos resultados en Europa de los equipos italianos y un torneo con muy poco valor televisivo que provoca que prácticamente ninguna figura del fútbol mundial juegue en el país transalpinpo, ya que ni si quiera los grandes históricos, pueden competir en salario con los grandes de Inglaterra, España y Alemania.
Ante este panorama, la única salida es crear una gran Liga Europea, que capitalice los miles de millones de aficionados al fútbol en el mundo. No tiene sentido que siendo el balompié el deporte más global, la Champions solo valga 1500 millones en derechos de televisión, por 7000 de la Liga de Fútbol Americano , NFL, (Superbowl solo es la Final). Es cierto que por formato, el fútbol, permite muchas menos pausas publicitarias que los demás deportes, pero crear una supercompetición europea donde cada semana te midas a uno de los grandes de Europa, da hasta ganas de ir a La Peineta.
Esta competición sería un sueño maravilloso con unos ingresos de televisión estimados de 300 millones por equipo, que de momento su mayor escollo lo tiene en Inglaterra donde el volumen de aficionados está equilibradamente repartido entre todos los equipos, porque lo que sería muy impopular y casi una cuestión de Estado que cualquiera de sus conjuntos abandonase la Premier.
14 marzo, 2016
No, señor Leiva. La alternativa no es crear una liga europea cerrada que elimine por completo la gracia del fútbol, que es que cualquiera llegue a ser campeón. Con ese modelo sería absolutamente imposible, por poner un ejemplo, ver lo del Leicester de este año. Y no olvidemos que nuestro Atleti se habría quedado claramente fuera del mercado hace apenas tres o cuatro años, y dados los antecedentes de gestión delictiva y negligente que sufrimos, no cabe duda de que volverá a ocurrir lo mismo en cuanto Simeone se largue. La alternativa es que el dinero esté distribuido de forma sensata y equilibrada entre todos los clubes para fomentar la igualdad. Otras reglas específicas tampoco vendrían mal; se me ocurre, por ejemplo, la obligatoriedad de jugar con un mínimo (pongamos 5) de jugadores procedentes de la cantera en todo momento en el campo. Pero el proyecto de liga europea, lejos de ser maravilloso, aumentaría aún más la brecha entre ricos y pobres y, además, a la larga acabaría haciéndose igual de aburrido.
14 marzo, 2016
Con una Liga Europea con un reparto igualitario de tv y un draft de fichajes como el de la NBA, cualquiera de los participantes, podría ser campeón.