Tenemos que dejar de hablar de João Félix. Seguramente, al lector que vea este artículo le resulte contradictorio que diga esto mientras escribo unas líneas sobre el portugués. Pero hay que empezar a reivindicar esta idea. No hay caso João Félix en el Atlético de Madrid. Ayer, Diego Pablo Simeone lo dejó claro en una de sus mejores ruedas de prensa en años. Cuando João está bien, juega. Cuando João está mal, no juega. O mejor dicho: juega de más. Sus salidas del once se deben exclusivamente a su rendimiento. No sucede lo mismo con otros futbolistas como Ángel Correa, quien sí suele ser relegado al banquillo pese a ser el jugador más en forma del equipo. El ejemplo del argentino sí daría para hablar sobre la supuesta meritocracia que mueve al ‘Cholo’, pero no el de João.
El ‘7’ del Atlético de Madrid ha pasado de ser indiscutible a quinto delantero en apenas dos meses. Nadie cambia el campo por el banquillo en tan poco tiempo por pura inquina del entrenador. ¿Qué ha pasado entonces? Que João ha sido más protagonista por sus gestos fuera del campo que por su incidencia dentro de él. Por el camino, cero goles y cero asistencias avalan al luso en el año de su irrupción definitiva. El nivel ofrecido por el talento portugués en el tramo final de la campaña pasada invitaba a la esperanza. Ello, sumado a una fantástica pretemporada, convenció a Simeone de que João sería la piedra angular sobre la que giraría el juego ofensivo del Atlético de Madrid. Se equivocaba.
Comenzó la temporada y, tras Getafe, João se diluyó. Desde aquella exhibición en el Coliseum, no se ha vuelto a saber nada del portugués. Mientras tanto, Griezmann y Correa han dado pasos adelante. Incluso Morata, quien también ha ido de más a menos en este primer tramo del curso, ha ofrecido unas prestaciones superiores a las del ‘7’. El resultado es el que vemos ahora. João Félix es el delantero menos en forma del Atlético de Madrid. Y en una posición donde abundan los recursos, lo último que necesita el equipo es un suplente que, cuando sale, resta más que suma.
Se suele decir de João Félix que es un futbolista diferencial. Después de cuatro años, es hora de poner en duda esta afirmación. Tener talento no te convierte en un crack. Es la continuidad, y no los destellos, la que marca la diferencia entre los jugadores prometedores y los mejores. João hace tiempo que se quedó estancado entre los primeros. Por eso, conviene dejar claras las cosas. El portugués no es suplente porque se lleve mal con Simeone, sino porque es peor que sus compañeros. Esa es la única y cruda verdad.
15 octubre, 2022
Bueno, yo no sé quien tiene la culpa. Lo que sí sé, es que el Cholo no trata a sus jugadores por igual. A Correa le castiga sistemáticamente, aunque casi siempre que juega, se gana esa confianza. Con Lemar, ha estado el entrenador poniéndole de titular durante muchos partidos, aunque el juego del francés en esos momentos, era más ayudar al equipo contrarios que al propio.
15 octubre, 2022
Estoy de acuerdo con tus palabras acordaros de arda turan ,en el atlético si no corres y trabajas vas al banquillo y en eso estoy con el cholo
15 octubre, 2022
De acuerdo con el artículo.Angel se está ganando no y un puesto en el equipo titular sino un hueco en el escaparate de lo que debe de ser un jugador de equipo cuando juego sumo cuando no ánimo como un Atlético más. Félix no ha sabido superar el victimismo que tiene al jugar. Convencido estoy y seguro que hay datos de que le dan hasta en el carné, pero no sabe ignorarlo y seguir jugando haciendo daño como debe, jugando mejor que los defensores. Quizás necesite otra liga que me protejan más y otro equipo que no tenga la animadversión arbitral e institucional de la Liga. Lo que está claro que está historia se está acabando
15 octubre, 2022
Creo que este muchacho se lo a creído y no digo que sea malo pero pagar el aleti por el fue una barbaridad así que tal vez en enero sería una oportunidad para largarlo o si no que el cholo se lo deje al aleti B a ver si espabilada a mi personalmente nunca me gustó nada porque no a echo nada
15 octubre, 2022
En enero deberían cederlo que jugase mucho y bien, sin salirse no sea que lo quieran recuperar, y venderlo en verano intentando minimizar pérdidas