El Atlético de Madrid acude este domingo a Barcelona con el runrún en la cabeza de quien no renuncia a soñar. La empresa no es factible. Para apurar sus mínimas opciones de título, los rojiblancos necesitan ganar en un feudo que llevan 17 años sin asaltar. Enfrente tendrán a un Barça que ha cosechado 36 de 42 puntos posibles como local y que apenas ha encajado dos tantos en su estadio. Un acto de fe, sin duda. Pero este nuevo Atleti de Simeone ha renovado las ilusiones de todos los que, en diciembre, abogaban por derrumbar la casa.
Cuatro meses después, Diego Pablo ha demostrado a sus detractores que estaba en lo cierto. El Atlético de Madrid es el mejor equipo de las cinco grandes ligas en esta segunda vuelta. En este período, los colchoneros han acumulado 29 de los 33 puntos en juego; es decir, nueve victorias y dos empates. Los dos únicos «pinchazos» se produjeron en casa contra el Getafe (con un gol de penalti en el 83′) y en el Santiago Bernabéu contra el Real Madrid, donde sobra decir lo que sucedió. Aun con ello, en ambos casos, el Atleti también iba por delante en el luminoso.
Dicen que las comparaciones son odiosas, pero hay situaciones en las que terminan siendo flagrantes. El mercado de invierno le permitió al ‘Cholo’ acometer la limpia que deseaba. Matheus Cunha, Felipe y João Félix volaron hacia Inglaterra en busca de minutos para retratar a su exentrenador. Sin embargo, la realidad ha sido completamente opuesta. Como titular indiscutible de un equipo supuestamente ofensivo como el Chelsea, João no ha conseguido mejorar sus registros de colchonero. Casualidad o no, los blues se han desplomado junto a él. El Chelsea es 11º en la Premier League y apenas ha sumado 11 puntos de 30 posibles con el portugués en el campo. Mejor suerte ha corrido Cunha. El delantero brasileño ha superado sus cifras goleadores con el Wolverhampton, pasando de sus cero goles con la elástica rojiblanca a uno con los Wolves.
Pase lo que pase de aquí a final de curso, Simeone ya ha ganado. El argentino ha evidenciado que tanto él como su guardia pretoriana siguen estado vigentes. Y una victoria del ‘Cholo’ es una victoria para el Atlético de Madrid. Quizás, después de la decepción en Europa, hoy les cueste verlo. Pero algo grande se está gestando en el horizonte. Simplemente, dejen trabajar a Diego Pablo. La historia no se repite, pero rima. Y en ella, Simeone siempre tiene razón.