Saúl, tienes que ser tú el que haga campeón al Atlético de Madrid. No puede ser otro. No debe ser otro. En esta agónica espera hasta el sábado me puse escuchar la canción de Leiva y Sabina, maldito huracán de sentimientos, con unos versos que me llegaron al alma y que me llevaron hasta a ti.
Una melodía que habla de ‘resistir’. Recuerdo tu debut en el Calderón ante el Besiktas, cómo tocaste a la puerta de Simeone desde Vallecas y cómo peleaste y te ganaste un hueco en una plantilla que venía de ser campeón de liga. Nadie te lo puso fácil, resististe hasta llegar a lo más alto.
Tampoco viniste con ‘lamentos’. Solo tú sabes lo que cuesta ser titular en este equipo, tuviste unos grandes maestros como Torres y Gabi. Dos tipos que te enseñaron una cosa muy importante: si el míster no te pone lo suficiente, hay que responderle con más trabajo. Has jugado de central, lateral, extremo, mediocentro y nunca se escuchó una queja por tu parte.
Leiva canta que el Atleti ‘trata de sobrevivir’. Es inevitable retroceder a ese 25 de febrero de 2015 en el BayArena. Esa caída que te provocó un hematoma renal, que congeló a todos los atléticos, que hizo llorar a tu padre y que te obligó a estar ingresado en Alemania. Quisiste quitarte el riñón para jugar con el equipo… una muestra de amor tan grande que por supuesto no te íbamos a dejar hacer.
Para locura, la atlética. Una que “corona montañas y conquista escaleras”. Lo sabes mejor que nadie, tienes estrella. Todos recordamos tu chilena al Madrid, el gol al Bayern, la noche en Leicester, el cabezazo en el último baile bajo la lluvia del Calderón, tu grito en Stamford Bridge, el misil al Lokomotiv, la volea en la Supercopa, la rabia ante el Liverpool… Tantos momentos, tanta historia rojiblanca.
Estamos acostumbrados a verte a un nivel tan sumamente alto que las dudas salen cuando dejas de pisar el acelerador. No pasa nada, la familia rojiblanca siempre te va a esperar. Si tu disparo ante Osasuna pegó en el palo es porque el destino te tiene reservado otro final. Todos recordamos el gol Pantic, el de Simeone, el de Miranda y el de Godín. Ese privilegio en la historia te pertenece. Siempre que te caes, te levantas. Y es hora de levantarse en Valladolid. ¡Vamos!
Foto: atleticodemadrid.com
20 mayo, 2021
Es cierto que se le ve esta temporada sin confianza, aún así, yo personalmente prefiero a Saúl al 50% y sin confianza que a muchos otros.
Es un FUTBOLISTA así en mayúsculas y de los más duros que he visto.
Esperemos que no se marchite y se acabe yendo del Atleti.
Saludos
20 mayo, 2021
Está mejorando últimamente, creo que es cuestión de anímica.
20 mayo, 2021
A Saúl lo único que le falta, es confianza.
20 mayo, 2021
Saul es un jugador que se ha sacrificado en estos dos años de transición por jugar donde se le pedía. Ha antepuesto el club a su lucimiento personal y quizás a su progresión.
Es un jugador de club, cien por cien.
Pero lo fácil es crujir al que tiene un bache.
Simeone ha respetado el posible mérito de otros para ponerles en su puesto y ello ha conllevado que pierda la titularidad.
Lo que también hemos visto es que Simeone en cuanto ha podido le ha seguido dando minutos y partidos.
Todos los deportistas sufren episodios como el de Saul, pero seguro que él volverá. Ahora vienen vacaciones y eso siempre hace que se vuelva al tajo con mas fuerza.