Ya es casualidad que justo el día que el club manda el email para la renovación de los abonos, con una subida, los diarios As y Marca nos cuenten que el club va a hacer una ampliación de capital de 70 millones, para según ellos, volver a competir con los más grandes.
Según las normas del control económico de Laliga, que en los referente a las ampliaciones de capital fueron modificadas el año pasado, los clubes pueden gastar fichajes en dos temporadas el dinero inyectado a través de ampliaciones de capital, hasta el año pasado había que dividirlo en cuatro años.
Es decir, dando por bueno que el 100% del dinero de la ampliación vaya destinado a fichajes podrían gastarse 35 millones este año y 35 el que viene en el mejor de los casos. No parecen cantidades con la que se puedan traer a grandes jugadores, desde luego.
Y no solo hay que acometer los fichajes, luego hay que tener límite salarial disponible para poder inscribirlos.
Justo además esta semana estuve con una persona del club que me dijo que el objetivo a medio plazo no es ganar títulos, que si se ganan bien, pero el verdadero objetivo es pasar de ser el club número 15 en ingresos de Europa, al octavo. Esto, además de reportarle más dinero a los dueños, si permitiría competir con los grandes.
26 mayo, 2024
¿Y cómo se aumentan los ingresos del Club sin ganar y competir por títulos?
27 mayo, 2024
Si no se ganan títulos, ¿cómo quieren tener el octavo equipo de Europa en ingresos?
Además, ¿qué es «medio plazo» en fútbol, un lustro, una década, veinte años (de 1977 a 1996, aprox.)…?
Vamos a ver las cosas como son, no como gustaría que fueran, por muy duras que sean. Algún que otro futbolista dijo esta temporada, casi con lágrimas en los ojos, tras ganar merecida y brillantemente al Real Madrid en el Metropolitano la eliminatoria de copa por 4 a 2, que se alegraba mucho de ofrecer la victoria a la afición, porque así los niños del Atlético podrían ir al colegio y no tener que avergonzarse de perder una y otra vez con el eterno rival, esa especie de «bullying» vergonzante que durante décadas tiene que padecer el aficionado atlético por parte del merengue sin el más mínimo argumento contrarrestador, salvo el del estéril e impotente «antimadridismo» que no gana ni un solo partido y mucho menos títulos. El odio al rival al que todos quieren ganar no mete goles.
Pues bien, si el objetivo del At. Madrid es «aumentar ingresos» (se supone que para engrosar los beneficios de la inmobiliaria de los Gil y para las pelis de Cerezo), sin más, sin ganar títulos, ¿cómo se sentirán esos mismos niños, la «futura» (si es que queda alguna) afición (si tiene la casi fidelidad de san Job de seguir siendo de un club perdedor permanente en el que ni la directiva quiere ganar títulos y en la que se trata a toda la afición a palos y latigazos frustrando sus falsamente fomentadas expectativas temporada tras temporada), cuando los que son del Real Madrid le paseen por los morros con carcajadas, burlas y mofas de todo tipo que su equipo ha ganado 36 ligas por solo 11 del Atleti y 15 Champions por 0 de los de «qué manera de perder» y no se cuántos títulos oficiales más y con creciente diferencia frente a un equipo que no quiere ganar la Champions porque perder es «glorioso» y lo que se busca es el lema ese de Sabina? Ya va siendo hora de ser duros de verdad con lo que está rematadamente mal en este equipo desde hace décadas y apuntar toda la afición hacia el mismo obstáculo, la propiedad, para que o gane títulos o deje paso a otra propiedad que lo haga. Que no vendan falsas expectativas y maltraten a la afición. Ya está bien.