Guerreras, ganen qué queremos ir a Neptuno

El pasado domingo se vivió un hecho histórico que ojalá se vuelva a repetir. El inicio de algo grande, el día que el fútbol femenino venció la batalla al machismo y, por primera vez, más de 60.000 almas acudieron a un partido de la Liga Iberdrola. Un futuro prometedor que llena de orgullo a todos los atléticos, atléticas y, en definitiva, a todos los amantes del deporte español. 

Fue un Atleti – Barça de toda la vida, podríamos decir que el más importante que se ha vivido en el Metropolitano. Había un aura de grandiosidad, de orgullo y admiración por las 22 jugadoras que corrían sobre el verde. Los atléticos acudieron a la llamada de sus guerreras, arrimaron el hombro y reventaron el estadio. Muchos lloraron, se abrazaron e incluso se pellizcaron por ver a sus chicas en el estadio donde se entregará el trofeo de la Champions.

El sueño de todas las niñas que juegan al fútbol se cumplió el pasado domingo por la tarde. Amanda Sampedro saltó al campo portando el brazalete de capitán, guiando a las suyas a escribir una de las páginas de oro más bonitas del club. El club, en cambio, puso una merecida placa a sus futbolistas. A partir de ahora nadie podrá poner techo a las chicas que quieran ser futbolistas porque, como bien dice nuestro cántico, “nadie nos puede parar”. 

El siguiente paso es mirar hacia el futuro y conseguir que se vuelva a cumplir otra vez. El Atleti femenino aventaja tres puntos al Barcelona, puede ganar esta liga y, por qué no, se puede disputar el partido decisivo otra vez en un campo a rebosar. Se puede ir a Neptuno con las chicas como únicas protagonistas. Lo único claro es que nunca debemos dejar de soñar y que nuestras guerreras deben ir partido a partido para seguir derribando barreras. ¡Orgullosos de nuestras jugadoras!

Autor: Antonio Rodríguez

Periodista digital, de papel o de lo que sea, pero siempre reinventándome. Escribo sobre lo que me gusta y lo comparto con vosotros. De Almería. Música y mucho Atleti. Si se cree y se trabaja, se puede.

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1 Comentario

  1. «La pela es la pela», esta expresión se ha convertido en un sencillo referente para comprender que es lo que subyace tras las máscaras cotidianas, basten dos ejemplos.

    Las jugadoras del equipo femenino, famosas por su coraje y su pundonor, su entusiasmo y su capacidad de sacrificio en el terreno de juego. Lo tienen todo para triunfar en el deporte, sin embargo, dentro de poco volveremos a la realidad, se acabarán los focos, no habrá 60.000 espectadores y no coparán ni titulares ni portadas.¿Por qué?, porque no generan ingresos,¿hubieran ido 60.000 espectadores al Metropolitano si el precio de las entradas hubiera sido como el de sus compañeros masculinos?…la pela es la pela.

    Cristiano Ronaldo, buen jugador pero mal deportista, bestia negra del Atleti, goles en fuera de juego, piscinazos y agresiones impunes, rematado con un insulto en Turín, recogido por las cámaras de tv y dirigido a la afición del Atleti. Sin embargo, su imagen y su publicidad aparecen hasta encima mismo de donde escribo estas líneas…la pela es la pela.

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