Se nos había olvidado la sensación de ganar y convencer. Aferrados durante tanto tiempo al unocerismo no estamos demasiado acostumbrados a un partido como el del sábado en Mendizorroza.
Ante uno de los rivales más incomodos, que en su estadio no había encajado más de dos goles, el Cholo apostó por el triplete ofensivo y volvió a poner a Sául en posición de llegada al área contraria; el experimento funcionó a la perfección.
El ilicitano, que se ha pasado buena parte de la temporada instalado en la pareja de mediocentro, volvió a demostrar que cuando le sitúan con opciones de llegar al área rival, lo hace con facilidad y hace goles. En 5 minutos tuvo dos ocasiones claras de gol, más que en el resto del año.
Esta noche contra el Gerona no se podrá repetir el esquema por la lesión de Costa y porque la variable más factible, Lemar, también está lesionado, pero lo que ha quedado claro, es que el sistema de minimizar errores nos ha traído muchos éxitos, pero ganar jugando bien, tampoco está tan mal.
Foto: atleticodemadrid.com
2 abril, 2019
Repasemos todas las opciones:
– Ganar y convencer: Es lo más deseable, cuando el Atleti lo hace, no tardan en salir voces sobre su juego violento o las ganas de algunos jugadores de irse a otro equipo.
– Ganar y no convencer: Lo normal sería que esta opción se admitiera como buena, pero las mismas voces de antes y otras más, saltan reclamando también un cambio de sistema de juego o incluso la cabeza de Diego Pablo.
– No ganar y convencer: Esta opción se da muy pocas veces, y tradicionalmente, no era mal vista por la afición. Si se repite más de la cuenta, convierte al Atleti en el equipo simpático que le gusta a la Caverna.
– No ganar y no convencer: Sin comentarios.