El Atleti está fuerte y no se arruga ante nadie. Esta temporada ha sido capaz de aguantar unos cuantos chaparrones en estadios como el Parque de los Príncipes, Santiago Bernabéu o Montjuic. Jugador que entra al campo, pelea. Vuelve el ‘ADN Cholista’ y sólo nos queda seguir soñando.
Este Atlético de Madrid es competitivo y corre como el que más. El ejemplo de que algo ha cambiado en el vestuario fue la mentalidad ganadora que ofrecieron ante el Bayer Leverkusen: con 10 jugadores y el resultado en contra. Apretaron filas, entendieron el ritmo del partido, corrieron como nunca y la calidad de Julián (y Oblak) nos hizo llevarnos el partido.
Este Atleti tiene veteranía en el césped y no se ‘caga’ ante jugadores internacionales. Griezmann, De Paul, Julián, Giménez, Koke o Gallagher no se van a asustar por una encerrona en un estadio con techo o ‘en’infierno’ en un Allianz Arena del que tenemos grandes recuerdos. El Cholo ha sabido dar con la tecla, reconducir el drama que se vivió en octubre y tener al equipo a un suspiro del liderato, en semis de Copa y clasificado entre los 8 primeros de Champions.
Este Atleti es ambicioso. Ganó 15 encuentros consecutivos y se ha puesto la misión de ganar todas las jornadas de liga hasta el decisivo partido ante el FC Barcelona en el Metropolitano. Si consigue llegar invicto a esa fecha, probablemente lleguemos líderes en solitario. Las otras dos eliminatorias serán una partida de ajedrez que no me pienso perder.
Este Atleti vuelve a ser ese boxeador que no se rinde, al que le golpean una y otra vez y se mantiene firme. Ese tipo que está a punto del KO y, de repente, coge un poco de aire y te mete un crochet en la cara para ganar en el último asalto (como el gol de Sorltoh o los de Correa). El Atleti ha vuelto, no tiene miedo a nadie y va a pelear.
3 marzo, 2025
Sí, en efecto. Al Atleti se le vence por puntos, pero no por KO.
Ya pueden romperle el hígado y los riñones, ya puede tener la cara desfigurada y chorrear sangre, que hasta el campanazo del último asalto hay combate.
Tres finales de Copa de Europa y Champions tras prórroga y condena arbitral contraria en las tres. Así cae el Atlético de Madrid, no como ese par de corruptos que presumen de ganar con sus reglas y sus mafiosos institucionales y arbitrales.