El Atleti viajó a Sevilla de paseo para bochorno y vergüenza de sus seguidores, los que lo vieron por televisión, y también los que en gran número se desplazaron allí. Aquello fue un esperpento desde el principio hasta el fin. En el minuto 4, ya perdía con un gol en propia puerta de Giménez, pero aquello no fue lo peor, el partido fue acumulando despropósitos al ritmo de minutos hasta el pitido final en el que, lo mejor de todo, fue sin duda el resultado, una derrota mínima para una vergüenza máxima.
Simeone no da con la tecla, volvió a cambiar el once, dejó a Sörloth en el banco, también a Javi Galán, puso a un desastroso Reinildo, y a un desacertadísimo Lino. Pero lo que le sucede al equipo no es una cuestión de nombres, ni de cuestiones puntuales, es algo mucho más profundo. Ayer, en el Villamarín, ni un solo jugador, con la excepción tal vez de Giménez, entendió lo que significa vestir la zamarra rojiblanca. Ni uno solo, ni siquiera el capitán. Incomprensible ver el espíritu con el que deambularon por el campo durante los 97 minutos que duró el partido, sin un arranque de pundonor, sin un solo arrebato de rabia por lo que allí estaba sucediendo.
El Betis se puso por delante pronto, pero pudo haber dejado sentenciado el partido en la primera parte. El Atleti era un monigote ante su presión adelantada. Corrían como lobos tras una presa dócil los verdiblancos. El Atleti caminaba por el campo, erraba pases a dos metros, se dejaba arrastrar por la fuerza local. Sólo la fortuna y los palos y la limitación de una plantilla tan inferior hicieron que la derrota al descanso fuese por un gol de ventaja.
En la segunda mitad entraron de inicio Sörloth y Javi Galán para tratar de arreglar el desaguisado. Hubo algún acercamiento tímido, pero nada consistente, de nuevo el Atleti se subió al barco del conformismo, de la abulia y comenzó a arrastrar la camiseta de nuevo. Correa, Giuliano, y hasta Lemar al final se sumaron a un partido al que es difícil encontrarle calificativos sin entrar en la repetición. De nuevo fue el Betis quien tuvo cerca el gol, y pudo hacerlo en multitud de ocasiones, un milagro para el Atleti preservar ese resultado que no hacía justica con el ridículo que perpetraron para vergüenza de toda su afición.
Simeone tiene un grave problema, porque este grupo no está entendiendo cuál es el espíritu del Atlético de Madrid. Tiene un problema porque no da con su once, no encuentra el sistema, los jugadores no saben si entran o si salen, pero lo peor de todo es lo otro, lo que se percibe, lo que se siente, jugadores cabizbajos arrastrando los pies por el campo y errando pases a dos metros, sin ser capaces de realizar una sola presión. Las alertas, todas, están encendidas, y todavía no ha terminado octubre.
28 octubre, 2024
Somos el equipo que peor juega de 1ª división y, probablemente, peor que los 12 primeros de 2ª.
28 octubre, 2024
Está bien que se critique a los jugadores. Han arrastrado la camiseta sin ningún pudor. Pero, el entrenador, es el mayor responsable de este desaguisado. No sabe a que quiere jugar, ni siquiera tiene un equipo titular fijo. El tema de las bajas, no es excusa. Al equipo contrario, le faltaban jugadores tan titulares como Loselso, Kiko, o Carballo.
Cada vez son más los jugadores importantes que no quieren jugar aquí, pr culpa del entrenador. Vienen de equipos donde se salen, llegan aquí, y no dan una a derechas. Parece que este equipo, se haya comvertido en un cementerio de jugadores con talento.
Además, no entiendo como mantiene a jugadores como De Pol, o Molina en el equipo. Parece que juegan con el equipo contrario.
Creo que los canteranos, merecerían una oportunidad. Supongo que peor que estos jugadores, no lo harían.
Siento una sana emvidia, de ver el sábado pasado en el Bernabeu, a 8 canteranos de la masía en el terreno de juego, acompañados de algunos veteranos, y, (aaaaaaaaaaaaQué gusto da verlos jugar).
En fin, no sé que más tiene que pasar, para que el entrenador dé un paso al frente, y no conduzca al equipo a una situación tanto económica como deportiva, insostenible.
A lo peor, ese equipo catalán que, con todos los respetos, no sé ni en que división juega, nos manda para casa y, como si no pasase nada.
Quiero a Koke, pero no me gustan las declaraciones pos partido. Creo que tendría que ser más valiente, y decir la verdad.
28 octubre, 2024
Hace ya muchos años que el Atleti jugaba fatal con el Cholo. Tan pobre era su desempeño y tan lejos estaba de volver a competir para campeonar y de ilusionar, que algunos queríamos ya su marcha, con la consiguiente lluvia de críticas, en esta web sin ir más lejos. Luego consiguió, tras una primera vuelta formidable en la temporada de la plandemia, ganar la Liga, y nos calló la boca a todos los críticos. Qué podrías decirle a alguien que te consigue, de nuevo, ganarle el campeonato de la regularidad, o sea, la competición más difícil del mundo, a los dos gordos más gordos del fútbol mundial, que juegan además, y siempre, con, digamos, de media unos 8 ó 10 puntos de ventaja.
Después ya, en el año del vergonzoso mundial catarí, donde no es ocioso recordarlo, el simpar Messi consiguió hacer campeón del mundo a Nahuel Molina, el Cholo no solo consiguió enderezar en la segunda vuelta el rumbo de un equipo que había tirado la temporada en Diciembre, sino que lo hizo jugar mejor que nadie, logrando con brillantez remontar hasta la 2° plaza, aunque el árbitro de turno lo dejara tras la última prevaricación de la temporada en el 3° puesto, y nos quedó a todos la frustrante sensación de que, si hubiera estado vivo en las competiciones por eliminatorias, hubiera podido llevarse cualquiera de ellas.
Lo de ahora creo que todos convenimos en que es distinto, mucho peor y que nunca se lo habíamos visto. Jugar mal es una cosa, pero puede estar muy lejos de que te avasallen, como ha ocurrido ya varias veces en el último mes. La hecatombe de Lisboa nos dejó helados, porque no creo que nadie la esperara y porque nos habíamos ilusionado con los fichajes. Pero tras la estupefacción de ese dìa, creo que la mayoría empezamos a pensar que eso no podía haber sido solo un accidente. Podíamos habernos llevado 8, como ayer. La manida expresión futbolera de no dar con la tecla no puede resumir este absoluto desastre. No tengo idea de lo que hay que hacer ni si Simeone será capaz de revertir esto. Pero no tengo más remedio que recordar un gran artículo que reprodujo MD hace unas semanas y que había escrito un periodista inglés, en el Times si no me equivoco, sobre el cruce de trayectorias de Arsene Wenger y Diego Simeone cuando las semifinales en la Eurooa League entre Arsenal y Atleti el año que se la ganamos al OM. Wenger estaba en el ocaso, lánguido y mortecino, y se había convertido en una parodia de sí mismo, como un tipo que explicara en un claustro vacío una teoría sobre el fútbol que a nadie interesaba y que nadie entendía . Y así retrataba al Simeone de ahora, como otra parodia de sí mismo, pilotando a un equipo sin alma que no conserva ninguna de las cualidades con las que lo adornó.
Malos tiempos para el Atleti.
29 octubre, 2024
¿»Campeonar»?¿No será mejor, «quedar campeón» o «lograr el Campeonato»?
Buenos argumentos, pero lo malo es que ¿quién puede hacerlo mejor que Diego P. Simeone teniendo en cuenta los que podrían venir por ficha y querrían venir por prestigio?
La verdad, no veo a Guardiola, a Klopp o a otro gran entrenador comprometiéndose con este equipo sin ninguna garantía de éxito (hace años Arrigo Sacchi dejó el club porque no podía soportar la pésima calidad de la plantilla en un entrenador acostumbrado a ganar siempre, incluso copas de Europa), pues la plantilla esta sobrevalorada en extremo y no es plantilla en absoluto para ganar nada, en todo caso para quedar terceros como mucho garantizando así la Champions. Ni Julián Álvarez, ni Sorloth, ni Gallagher (que empezó bien) han resultado ser lo que de ellos se esperaba. Han sido una apuesta arriesgadísima que ha salido, una vez más, mal. Si se ficha mal, nadie puede mejorar resultados por muy buen entrenador que sea. No se puede hacer nada con jugadores mediocres. Y mucho menos con los que pasan de rendir, como Rodrigo de Paul. Por su parte, los mejores, están ya muy fatigados, tienen plomo en las piernas: Griezmann, Koke, Llorente y Giménez, ya están muy sobrecargados temporada tras temporada. Necesitan relevos de calidad que no tienen. Y así se agota al equipo ya a los dos meses de empezar.
Y no vale que luego se ganen tres partidos seguidos a equipos más flojos y vuelva a venderse una vana ilusión. Valen los títulos. Otra cosa es engañar.
Lo de poner un día sí y otro también, con una cabezonería soberbia (para hacer ver que tiene razón cuando no es así) que paga todo el equipo, a Nahuel Molina es de traca. O sea, Simeone expulsa del equipo a Galán por un mal partido en Glasgow, y no lleva al banquillo a su compatriota tras 20 penosos de 22. Ya avisaban los más sensatos que ese jugador debía haber sido traspasado de inmediato tras acabar la temporada pasada, que el Atlético necesitaba un lateral derecho de garantías como el jugar con 11 y no con 10. Pero la dirección técnica pierde ligas también si no trae buenos fichajes. El Atlético de Madrid es uno de los equipos más ineficientes que existen. Malgasta sus recursos. Y así no se puede ganar absolutamente ningún título. Luego no es solo Simeone, sino también los técnicos que malgastan el presupuesto y que no seleccionan buenos jugadores para ganar títulos, que no solo al Leganés, y no atienden la cantera desde hace décadas.
29 octubre, 2024
Por cierto, espero que si al alto mando del equipo (directiva y técnicos) se le ha pasado por la cabeza reemplazar a Simeone por Luís Enrique, actual entrenador del PSG, que se lo quite de inmediato de la cabeza.
Lo que Luís Enrique hizo en la selección española de fútbol, teniendo los mejores jugadores como sus predecesores desde Del Bosque (que acabó aletargando a los convocados sin apenas intensidad y solo con posesión, más posesión y solo posesión y nada más), por mucha excusa que pusiera, es de mal entrenador no en lo técnico, que es un genio indiscutible como demostró en el FCB, sino en el compromiso por ganar títulos, pues teniendo la mejor selección de Europa y del mundo (como ahora la tiene Luís de la Fuente, no tan buen entrenador como el asturiano hasta el momento en lo técnico), su desidia y haraganería transmitida a los futbolistas con sus interminables rondos en partidos oficiales, reservándose solo para sus clubes y sin patriotismo alguno (parece mentira en un descendiente de las huestes de Pelayo), le dejaron en muy mal lugar, especialmente tras lo que hemos comprobado este año con Luís de la Fuente (y eso que éste no ha apretado al máximo a la selección en cuanto a intensidad y contundencia, que si no, hubiese ganado con más holgura sin hacernos sufrir tanto). Que no venga al Atleti a hacer rondos y dosificaciones por calendario apretado para demostrar al Barsa que él es el mejor entrenador del club blaugrana. Aquí despechados nada. Y en la selección menos, que es el equipo que los españoles de todos los clubes quieren que gane siempre. Mejor que vuelva al Barsa, pero al Atleti no.
29 octubre, 2024
El sin par Messi, quise poner
29 octubre, 2024
Enhorabuena a los que sois del Barsa por el 0-4 en el Bernabéu.
Toda una lección de fútbol sin trampas esta vez por parte de ambos tramposos. Ni Real Madrid televisión se queja de arbitraje. Por cierto, no sé a qué hora emitirán otra vez el partido en ese canal, para aprender de fútbol. Lo digo por Simeone.
Ojalá el Atleti nos diera una alegría igual de vez en cuando, pero el abismo que hay entre una plantilla y otra es abismal. Solamente Marc Casadó, un chaval del filial (coste 0, no como el de Julián Álvarez, flor de unos minutos), como Lamine Yamal, valen más que todo el centro del campo y la delantera del Atleti. La dura realidad. Y luego tienen a Gavi, a Pedri, a Olmo,… Será cosa del «presupuesto».
29 octubre, 2024
El próximo partido importante, Oblak de portero, Nahuel Molina lateral derecho, Witsel central, Rodrigo de Paul en el centro del campo…. Simeone los pondrá hasta que hagan algo bueno para «justificar» ante la afición que «nos aportan mucho» o «son muy buenos» como Lemar (todavía estamos esperando a que arranque de verdad, lesión aparte).
Cuando un entrenador se pone terco con su plantilla (especialmente si la ha configurado él mismo), malo para el equipo. Cómo les cuesta reconocer por vanidad que se han equivocado, no con el «planteamiento del partido o con no hacer rendir bien a los jugadores (cosa imposible en algunos)», no, sino en los fichajes, que ese es el talón de Aquiles del equipo. Se equivoca no en lo táctico, no, sino en lo estratégico, que es mucho peor. El problema no es jugar mal un partido, dos o tres, lo malo es jugar mal siempre, dar la impresión de que no se puede ganar nada con estos jugadores, salvo el tercer puesto para garantizarse los ingresos de la Champions para bien de Gilmar y la cinematográfica Cerezo. Si no se ficha bien, si no se forma a canteranos de alta calidad, no hay título que se pueda ganar.
¿Que no hay lateral derecho alternativo porque Azpilicueta está lesionado?
¿Y los del filial no cuentan cuando el Barsa está arrasando con los suyos en España y Europa? Ahora no hay tanta diferencia presupuestaria entre Atlético y Barsa, luego ¿por qué hay tanta diferencia deportiva entre una y otra plantilla? ¿No será falta de profesionalidad en unos en comparación de otros?
¿Seguro que el chaval del filial, con toda la ilusión que le haría jugar en el primer equipo y más hacerlo muy bien, lo haría tan mal como el argentino que, como ha dicho otro participante, le ganó el mundial Leo Messi, como a sus compañeros argentinos?
Otra posibilidad para partidos con rivales fuertes, quizá no óptima y sí muy discutible pero de urgencia: jugar un 1-4-4-2 siempre (siempre con cuatro defensas, como siempre hizo Simeone para ganar títulos) con Giménez de lateral derecho (ya lo ha hecho en otras ocasiones y, por cierto, nada mal) y Reinildo, que es lo suficientemente rápido, de central izquierdo en su lugar. Es decir:
Musso en portería (porque Oblak ha perdido mucha agilidad y reflejos, especialmente por alto. Tristemente ha llegado al ocaso de su carrera).
Lateral derecho: Giménez mientras no fichan a otro lateral de garantías o se recupera Azpilicueta.
Lateral izquierdo: Galán, que lo está haciendo magníficamente a pesar de algún que otro fallo (tiene muchos más aciertos que fallos y le pone mucha intensidad y ganas. Galán debe jugar de titular. Seguro que irá mejorando si mantiene su actitud positiva).
Centrales: Lenglet y Reinildo. Se podría probar con Kostis, por ejemplo si Lenglet no está recuperado.
Centro del campo: (a falta de los imprescindibles Barrios y Llorente) Koke, Gallagher (que puede que falle por no entender el idioma. Simeone no habla inglés, luego difícilmente podrá corregirle desde la banda para mejorar su rendimiento. Y con un sistema cambiante 1-5-3-2, luego 1-3-4-3, luego 1-4-4-2, luego a saber… no hay quien se sitúe, y menos si no entiendes el idioma), Riquelme (ya de una vez y por la izquierda. Simeone es muy severo con los del filial y les castiga al menor error, pero muy indulgente con los argentinos, especialmente con De Paul y Molina, los jugadores que destrozan el buen hacer de los otros compañeros) y Lino (por la derecha, dado que es diestro y no tiene mucho gol, pero si capacidad de incursión y desborde por banda y pase atrás). Con dos buenos laterales, se aprovecharía mucho la capacidad ofensiva de los interiores que tiene el Atleti.
Delanteros: Giuliano Simeone (en descanso de Griezmann en partidos con rivales no muy fuertes. Giuliano también le pone intensidad y ganas sin regateo alguno de esfuerzo. Realmente ha sido uno de los mejores «fichajes» junto a Le Normand y Galán. Si Giuliano sigue así, puede que sea uno de los mejores jugadores de la delantera del Atleti de la era de su padre) y Julián Álvarez (a ver si deja ya de ser flor de 5 minutos y justifica al menos la mitad de lo que se pagó por él. Eso sí, nada de ponerlo en banda. Lo más cerca posible del área, para aprovechar bien su fuerte disparo, que tiene que ir a gol cada vez más).