Último partido de este maldito año. Una temporada que está marcada por unos graderíos silenciados, una pasión esfumada y una transición que está casi acabada. El proyecto colchonero se consolida partido a partido y ahora toca mantener el liderato ante el Getafe de Bordalás.
El Atlético de Madrid se enfrenta a un equipo en horas bajas. Los azulones están en una situación comprometida, pero son los mismos jugadores intensos, muy ordenados defensivamente y capaz de contraatacar con mucho peligro. Son una copia del Atleti de Simeone y a un partido pueden hacer daño a cualquiera.
El Getafe es un equipo talismán para Simeone. Cada vez que el Atleti se enfrenta al equipo madrileño suele salir con los tres puntos. Todos recuerdan el 7-0, con chilena de Costa incluida, el año que se ganó la liga, el gol de Godín en el Coliseum, Torres anotando el gol 101 o la jugada maradoniana de Joao Félix en su debut en LaLiga.
Todas estas buenas sensaciones no deben cegar a los atléticos. Tampoco el puesto en la tabla de los de Bordalás. Para ganar al Getafe los rojiblancos deberán estar muy coordinados en defensa, ver cómo responde Vrsaljko en el lateral y cómo el Cholo adapta un esquema más ofensivo en la telaraña defensiva azulona. Un gol temprano puede decantar el partido y hacer que los rojiblancos no se angustien a la hora de mirar el reloj.
(Foto costa y lesión ante Getafe)
Diego Costa no estará, se despidió después de una etapa rojiblanca llena de trofeos, garra, pasión y agallas. La Pantera nunca tuvo miedo a nadie y fue capaz de contagiar a todos los atléticos de esa valentía. Siempre recordaremos cuando se jugó la tibia para anotar el 0-2 en el Coliseum, digno de ser uno de los versos del himno de Sabina y no esas “dos tetas de ‘Gran Hermano”.
El partido ante el Getafe siempre será especial y este año lo es todavía más. Ganar a los vecinos supone mantener el pulso, incitar a que los de Zidane pinchen y poner nerviosos a todos aquellos que quieren que caigamos. Ganar significa ser campeón de invierno. Ganar por todos los que se han ido en esta maldita pandemia. Ganar, ganar y volver a ganar.
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